Un Error tras Otro

Dentro de los muchos anuncios monumentales que ha hecho Triple H en las últimas semanas, es casi obligatorio hablar del que es quizás uno de los más grandes errores que ha hecho dentro de su mandato (peor que traer de nuevo a Hit Row o a un Karrion Kross con pelo), me refiero al anuncio del nuevo WWE World Heavyweight Championship.

Tenemos claro que el prestigio de un título va en proporción a los combates titulares que tiene y el tiempo que es campeón un luchador. Aunque este no es un factor decisivo, si ayuda bastante. Roman Reigns cumple bien con estos puntos en mi opinión, pero hay un problema crítico...su presencia. A diferencia de otros campeones, si Roman está ausente 3 o 4 semanas, incluso más tiempo casi no es novedad. Además, muchas de esas veces sólo aparecía en una escena de backstage que perfectamente se pudo grabar tiempo atrás, lo cual acentua su ausencia frente a los fanáticos. Esto podría pasarse por alto, pero el drama comienza cuando llevamos más de 2 años en esta situación, y lo peor, Roman Reigns no es un campeón cualquiera, es un campeón unificado, tiene los dos títulos mundiales.

Si WWE decidió tener dos títulos mundiales al tener dos marcas separadas es porque entienden que el campeón es una pieza importante de sus carteleras. Cada uno debe liderar cada show. Esto se ve más horrible cuando tenemos en la mesa más de estos datos. Pero todo tiene un comienzo y un final o es lo que esperabamos. La idea de un campeón es elevar el título para después traspasarle ese mérito al siguiente campeón. Es el camino más fácil de tener una estrella de gran nivel mientras refrescas las carteleras. Pero WWE en vez de hacer perder, o por último dejar vacante uno de los títulos se le ocurre la brillante idea (que removió los cimientos de la empresa) de crear un tercer título mundial.

El nuevo WWE World Heavyweight Championship tendrá un nuevo dueño tras un torneo especial. Este estará presente defendiendo constantemente el título y será exclusivo de la marca donde no estará Roman Reigns, en este caso y tras el Draft es RAW. En teoría, Roman tiene 2 títulos mundiales hasta que decidan fusionarlos o retirar uno de ellos (WWE Championship y Universal Championship). Se entiende, pero no se comparte, la idea del nuevo título. 

Habiendo aceptado esta situación, se veia un panorama interesante ya que el roster de RAW tendría una oportunidad de luchar por ser el primer campeón. Algo que siempre es interesante porque el primer campeón siempre es recordado. Incluso en la transmision del show se mencionó esto claramente pero WWE empeñada en tratar de ser "innovadora" cae en estupideces o cosas sin sentido. Durante la conferencia de prensa de Backlash se anunciaron los participantes de este torneo y el formato. Seis luchadores de RAW y seis de Smackdown lucharán en dos combates Triple Threat para después tener una final de marca. Los finalistas de cada lado tendrán un último combate para determinar el nuevo campeón.

Si vas a hacer un título exclusivo de marca, habiendo dejado claro tras el Draft el roster de cada show, porqué colocan luchadores de Smackdown a participar? Sabemos que no va a pasar, pero que sucedería si un representante de Smackdown gana la final, deberá irse a RAW? Para que hacer toda la parafernalia del Draft si ibas a hacer un torneo "global" para determinar al nuevo campeón de una marca? No hubiera sido mejor haberlo hecho después?

Habiendo asumindo todo esto, sin llegar a mencionar que el diseño del nuevo título a muchos les gusta y otros lo detestan, los participantes del torneo son una buena forma de demostrar la cantidad de talento de buen nivel que tiene WWE actualmente y seguramente no tendremos malos combates. 

RAW

Seth Rollins

Cody Rhodes

Shinsuke Nakamura

The Miz

Damian Priest

Finn Balor

SMACKDOWN

AJ Styles

Austin Theory

Bobby Lashley

Sheamus

Edge

Rey Mysterio

En resumen y siempre como opinión personal. Si es orden de la cadena de TV, por miedo a despotenciar a su mejor estrella o incluso porque no creen que haya un reemplazo a su nivel, no quisieron destronar a Roman Reigns. En su momento alguien conocido (que no recuerdo su nombre) dijo que ya no estamos en la era de los territorios para tener un campeón eterno. Estamos en la era de la TV Mainstream y debe haber un ritmo constante para mantener fresco el producto. Varios de los últimos combates de Roman Reigns caian en lo mismo, así es que tampoco es que sean una gran maravilla. Han habido muchos errores seguidos aunque algunos puedan defender esas posturas y se respetan, pero llegará un momento cuando esta situación ya no se pueda sostener y el producto decaiga. Espero que no lleguen a ese punto porque la salud del wrestling actualmente es bastante buena y para nosostros los fanáticos siempre es una buena noticia.